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LA PROTECCION DE CORDILLERA DE NAZCA Y SALAS Y GOMEZ

  por Por el Emb. José Luis Pérez Sánchez-Cerro

El Embajador José Luis Pérez Sánchez-Cerro, Secretario General de la Comisión Permanente del Pacífico Sur y Presidente del Consejo de Relaciones Internacionales de este Instituto reflexionó sobre la protección de amplias zonas de la cordillera. El tema se embarca claramente en la defensa del medio ambiente y la biodiversidad

El 29 de noviembre de 2022, participé en Santiago de Chile en el taller “Visiones de la Región” organizado por el Ministerio de Relaciones Exteriores de Chile, juntamente con el “Coral Reff of the High Seas Coalición” (CRHS), representantes de gobiernos, la sociedad civil, científicos locales y miembros de la coalición de CRHS.

Lo hice en mi condición de Secretario General de la Comisión Permanente del Pacífico Sur, con una ponencia y con preguntas y respuestas en dicho taller sobre la protección de las áreas de las cordilleras de Nazca y Salas y Gomez.

La idea central fue conocer las prioridades de los gobiernos de la región, identificar las acciones para proteger dichas regiones, revisar el estado actual de las ciencias y sus vacíos, definir el contexto político y el apoyo de los gobiernos para desarrollarlos, así como las posibilidades de cooperación.

Sobre el particular empecé diciendo que la Iniciativa “30x30”, es el nuevo acuerdo mundial por la biodiversidad cuyo propósito es la conservación de áreas marinas protegidas que constituyen el 30 por ciento del océano a nivel global al año 2030 para asegurar la biodiversidad para el futuro, lo que debe incluir la protección en áreas más allá de las aguas jurisdiccionales que todavía está en negociación.

Tiene como objetivo designar al menos el 30 por ciento de toda la tierra y los océanos como "áreas protegidas" para 2030. El objetivo se creó por primera vez en 2019, con más de setenta países que acordaron participar. Convertir el 30 por ciento del planeta en áreas protegidas para el año 2030, es la ambiciosa propuesta que se discutió en la Cumbre sobre Biodiversidad, en el marco del 75 período de sesiones ordinarias de la Asamblea General de las Naciones Unidas de 2020 bajo el lema "Acción urgente sobre la biodiversidad para el Desarrollo Sostenible".

A pesar de algunos avances alentadores en materia de conservación, los ecosistemas del mundo siguen degradándose y las poblaciones de plantas y animales continúan desapareciendo de forma acelerada. Por ello la humanidad debe emprender transformaciones urgentes para garantizar su bienestar y la del planeta frente a la que sería una extinción masiva.

Esta meta elaborada por el Convenio sobre Diversidad Biológica (CDB) de la ONU, hace parte de una estrategia para garantizar el sostenimiento de la vida de todas las especies de la Tierra, incluyendo la humana.

Los científicos insisten en que debemos tener el 30 por ciento de nuestros océanos altamente protegidos para 2030 a través de 'Áreas Marinas Protegidas'. El camino para llegar allí sigue siendo accidentado, ya que las comunidades locales e internacionales se enfrentan a cambios repentinos y perturbadores.

Vigilar un área tan grande de los océanos del planeta es casi imposible; y es inevitable que algunas actividades de contaminación, pesca y otras, continúen realizándose ilegalmente. Sin embargo, la mayor parte de las aguas que las rodean, aproximadamente un 73 por ciento , se encuentran fuera de las jurisdicciones nacionales. Así, gran porción de ellas se encuentra sin protección y bajo la amenaza del cambio climático, la contaminación por plásticos y la sobrepesca, entre otros.

Al cumplirse 70 años de la creación de la Comisión Permanente de la Comisión del Pacífico Sur (CPPS), podemos mostrar con orgullo la tarea cumplida por nuestra institución. La Comisión Permanente del Pacífico Sur es una organización internacional de carácter regional integrada por Chile, Colombia, Ecuador y Perú, países ribereños del Pacífico. El objetivo central de la CPPS es coordinar las políticas marítimas de los Estados miembros.

El océano tiene un papel determinante en la producción primaria global y también en los ciclos de nutrientes esenciales para la vida, como el nitrógeno y el fósforo. También el océano proporciona recursos de todo tipo, como hidrocarburos, energía, minerales y alimentos.

Por otro lado, es un espacio utilizado para transporte y comercio entre continentes, el 90 por ciento del comercio mundial se realiza por mar.

A raíz del aumento de las emisiones de CO?, entre otros gases de efecto invernadero, ha habido un calentamiento global del planeta. El océano absorbe el CO? y en consecuencia tiende a acidificarse.

Hay un aumento de temperaturas en los océanos lo que ha ocasionado, por ejemplo, que en los últimos 150 años la superficie de los arrecifes de corales vivos se ha reducido a la mitad.

El océano está gravemente amenazado, la contaminación, la sobreexplotación pesquera, la explotación minera y la falta de áreas marinas protegidas son algunos ejemplos de las graves amenazas que recaen sobre el océano.

Esta propuesta ha sido debatida entre los 193 estados miembros que forman la ONU durante el debate del “Tratado Global de los Océanos»”, un pacto que pretende proteger la biodiversidad marina mediante la protección de un 30 por ciento de las aguas internacionales de los océanos para el año 2030.

La Comisión Permanente del Pacífico Sur, es una organización internacional de carácter regional integrada por Chile, Colombia, Ecuador y Perú, países ribereños del Pacífico. El objetivo central de a CPPS es coordinar las políticas marítimas de los Estados miembros.

La célebre Declaración de Santiago de 1952, revolucionó la historia del Derecho del Mar, al unificar las posiciones unilaterales de los países firmantes que establecieron, como norma de su política internacional marítima, la soberanía y jurisdicción del Estado costero hasta las 200 millas.

La Comisión Permanente del Pacífico Sur (CPPS) es un organismo internacional y, por tanto, es persona jurídica de derecho internacional, de conformidad con lo establecido en el Convenio de Paracas, Perú, del 14 de enero de 1966.

La Declaración de Santiago fue una nueva forma de concebir al mar; es decir, ya no como un espacio militarizado o de seguridad como había sido por más de 2000 años, sino con un clarísimo concepto socioeconómico, donde lo relevante ya no eran las aguas en sí mismas, sino sus recursos.

Por ello, a 70 años de su fundación necesario replantear la función de la CPPS como organismo internacional. Esta debe ser dinámica y flexible.

Igualmente, se debe fomentar la cooperación en acciones conjuntas en la lucha contra el cambio climático.

La Comisión de la CPPS es, además, la Secretaria Ejecutiva del Convenio para la protección del Medio Marino y la Zona Costera del Pacífico Sudeste firmado en noviembre de 1981.

Es necesario mencionarse que este año de 2022, se cumple el 40 aniversario de la Convención del Mar, abierta a la firma el 10 de diciembre de 1982.

Salas y Gomez y Nazca

Las cordilleras submarinas de Salas y Gómez & Nazca son dos cadenas de montes submarinas que se extienden a lo largo de 2900 kilómetros en el sudeste del océano Pacífico. Esta región posee más de 110 montes submarinos y está aislada de las costas de Chile y Perú por la corriente de Humboldt y una fosa profunda.

Los recientes esfuerzos de conservación de Chile y Perú podrían verse debilitados si no se protegen los ecosistemas circundantes situados fuera de sus jurisdicciones nacionales.

Es necesario restringir actividades pesqueras reguladas por la Organización Regional de Ordenación Pesquera del Pacífico Sur y la Comisión Interamericana del Atún Tropical. También, establecer un área marina protegida en alta mar en esta región, una vez que el tratado de las Naciones Unidas sobre la biodiversidad en alta mar esté finalizado y entre en vigor.

Desafortunadamente, existen varias amenazas que hacen que la fauna marina de esta región sea particularmente vulnerable. Una de ellas proviene de las flotas pesqueras extranjeras a gran escala - principalmente de China- además de la minería de los fondos marinos y la acidificación de los océanos.

Se hace necesaria una revisión de los principales antecedentes científicos sobre estas cadenas montañosas, como un insumo para la toma de decisiones.

Se debe incorporar no sólo estudios científicos, sino también jurídicos, económicos y geopolíticos, que permitan una adecuada gobernanza y sustentabilidad de los  eventuales usos de los recursos naturales en el área.

Los montes de Nazca y Salas y Gómez son uno de los accidentes geográficos submarinos más relevantes del Pacífico suroriental. La principal hipótesis que explica su creación, indica que estos alineamientos montañosos son de origen volcánico y estarían formados por el hotspot de Pascua.

Especies altamente vulnerables han sido registradas para la zona de los Montes Submarinos de Nazca y Salas y Gómez, tales como algunos tipos de corales pétreos, esponjas y peces de baja resiliencia.

Es necesario respetar el protocolo para la Conservación y Administración de las Áreas Marinas y Costeras Protegidas del Pacifico Sudeste suscrito en Paipa, Colombia en 1989. En él se establece la prohibición de toda actividad que pueda causar efectos adversos sobre la flora y fauna del ecosistema y su hábitat. La Secretaria Ejecutiva del Protocolo lleva el catastro de las informaciones.

Igualmente es necesario adoptar criterios comunes y prohibir el vertimiento de sustancia toxicas, perjudícales o nocivas, así como fomentar la investigación científica, crear normas de cooperación y sanciones y normas para la denuncia. El protocolo no admite reservas y sí permite adhesiones.        

Hay que fomentar la cooperación y desarrollar acciones conjuntas en la lucha contra el cambio climático y replantear nuestra función como organismo internacional. Ésta debe ser dinámica y flexible.

La pesca comercial emerge como una de las amenazas más inminentes para el área, particularmente en la zona bajo jurisdicción chilena ya que hasta la fecha no se han tomado medidas de manejo y conservación.

 Igualmente traté sobre la gravedad de los derrames de petróleo ocasionados en la playa de Ventanilla en Lima y en la Amazonía peruana que ha afectado a gran cantidad de poblaciones indígenas en la selva peruana por derrames de petróleo en el Oleoducto Norperuano. Igualmente, este año, se cumple el 40 aniversario de la Convención del Mar abierta a la firma el 10 de diciembre de 1982.Se ha determinado que el 65 por ciento de estos derrames fueron consecuencia de la corrosión de los ductos y fallas operativas. Una conclusión que busca abrir nuevamente la discusión sobre las responsabilidades en estos incidentes ambientales y la necesidad de remediar los miles de sitios impactados por los vertimientos petroleros que hasta ahora han afectado a 41 de los 65 pueblos indígenas de la Amazonía.

Cabe destacar que, en 2017, el Congreso de la República del Perú, creó una comisión investigadora para determinar quiénes eran los responsables de los derrames en el Oleoducto Norperuano. En su informe final, una de sus conclusiones fue la siguiente: “La comisión investigadora ha constatado la ineficiencia, inoperancia y falta de compromiso con la que vino actuando Petroperú en la gestión del Oleoducto Norperuano, en la conservación del ambiente, en la gestión de riesgos, en su relacionamiento y responsabilidad social frente a las comunidades nativas”.

 

12/12/2022

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